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Elliot Spitzer


Quería luchar por la moralité, y en 2004 desmanteló una red de prostitución y los trataba de "tráfic humanitarie" por eso le llamaban "Mister Limpio" pero la cosa se terminó de pudrir y pasó a ser el Cliente 9 del "Emperors Club" de la Gran Manzana donde por 1000 dolares tenía su gatita de leite de membrillos para unos polvorones. El mito del hombre claro se hizo yogurth desnatado en su cara de rata de alpillera, arrojándo la bombacha como gobernador de esta loca ciudad acompañado dice Elliot Spitzer por el sentimiento de culpa y dice Spitzer que no se puede permitir que su caída privé irrumpan en su life públic y dice Elliot que intentará servir el bien común (sea mojándose el orto u otros apetitosos degeneramientos de este ejemplo de hombre adicto al sexo por el ano del fono y gastando así lo dicen los journales la cifra aproximada a los 50.000 mil Euros con prostitutas de lujo, donde salen unos cuantos calambres y sudores para inundar todo el Central Park y el hombre como un verdadero nabo pide perdón y su mujer a su lado no lo mira pero le pone en la boca una cucharada de plutonio y un beso en la verga antes de peinarlo y asesinarlo, la verdad que la propia ansiedad de capturar inmorales, lo han convertido en un pajero mental al Gobernador de 48 años con tres hijos, cosas que pasan a nuestros hijos y se baja la tanga entre los fiscales para entrar sin condón en el hueco ardiente de sus encuentros sexuales, pero se equivocó, se le fue la pija en esos encuentros de los revolcones y las galletitas de su cuerpo cocido al de Kristen, 47 páginas están grabadas. Quemó todas las lineas Papá y pide perdón ante el mundo...nuestra mayor gloria dice consiste en saber levantarse cada vez que caemos...chau Cliente 9, mientras se cae el telón de otro servicio completo con lluvia de oro y terminación en la bouche; su mujer preciosa sale en la foto como su madre.

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