Prácticamente desconocido lo que hoy se publica al corazón de la nada; desgastado, sentado en el salón tras otro con la misma elegancia, corta, toda con suerte de privaciones y estrecheces destinadas a la foto autorizada del molino, con el bonito cuello de pico de cisne, y la segunda parte por empezar, sin saberlo sobre sus alas antes de posarse y volar, y dejar llevar la imaginación en un lugar obsoleto, oscuro, lúgubre al acabar, y no darle más cuerda ruda en la habitación des cericés, en otros tiempos que no vuelven a ver que iban a salir al menos una hora suelta, a tomar la leche del mediodía, como un bebé amamantado por cigüeñas y cebras en celo, en mil pedazos imponentes para no comer en la casa del cerdo que se larga con una fulana y resulta ser un tío con dos perolas de silicona punzantes, medio arrugadas, pálidas de fragmentos y memeces testiculares, por los suelos vuelcan y se llenan de miel, y ella chupa convertida en zebra; entre sus labios azúcares y glicerinas perdidas en forma de gotitas apenas a un paso del pulso moral.
Prácticamente desconocido lo que hoy se publica al corazón de la nada; desgastado, sentado en el salón tras otro con la misma elegancia, corta, toda con suerte de privaciones y estrecheces destinadas a la foto autorizada del molino, con el bonito cuello de pico de cisne, y la segunda parte por empezar, sin saberlo sobre sus alas antes de posarse y volar, y dejar llevar la imaginación en un lugar obsoleto, oscuro, lúgubre al acabar, y no darle más cuerda ruda en la habitación des cericés, en otros tiempos que no vuelven a ver que iban a salir al menos una hora suelta, a tomar la leche del mediodía, como un bebé amamantado por cigüeñas y cebras en celo, en mil pedazos imponentes para no comer en la casa del cerdo que se larga con una fulana y resulta ser un tío con dos perolas de silicona punzantes, medio arrugadas, pálidas de fragmentos y memeces testiculares, por los suelos vuelcan y se llenan de miel, y ella chupa convertida en zebra; entre sus labios azúcares y glicerinas perdidas en forma de gotitas apenas a un paso del pulso moral.
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