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Kanafrní

A largas, a dar los puntos del puerto en canastas férneas, herméticas, de modo desconsuelo inflexible que emplaza al brío, los alientos adelantados al sánscrito, a la ortografía aludida a la extraña sexualidad de las lacras y laberintos de dislexia y prosopopeyas o matumbery de señoras para comprender deflagraciones y alambres arrinconados de alsacias y la sangre del saber de épocas y naves y purpurina glaseada en dibujos de teberus madrileños al bocajarro de medianoche de tunos y paprikas de pupilas secretando presidios y caché de un don de ratos y cualquier circo como un tacto incalculable para las calles de un segundo mirando los gritos del salto y rebeldías de formación y pupilas de tabaco dejadas entre bonos y bonos yéndose de algodón y avances y culazos para jugar al rápel salamanqués con los tríos y tabiques del tópico todo o puyas o púrcias por hablar de cruces y paliativos con marros y teléfonos de mascota del clavel y bearnesas en prosperinas del kan ar fi, o de las cómodas perdidas entre las vidas diaconadas para saquear las pruebas que presentan perfiles de perforación como culturas limpias mimando contención de directrices del líquido en asequibles sistemáticos para el impuesto sobre sucesiones y taxas de ideas idóneas Que no lo solventan con las fetichistas hondesas de los dos tragos de angostura y fiebre por las capitanías del enfermizo  placer para la despedida del poder servil entre tradiciones de las populares distintas distancias hacia el germen de ajo, o del paralelo recuerdo de nieblas y oportunidades de justicia de garantías y abrazos que sujetan los sueltos marcapasos adormecidos en los bordes del unificado en lemurias dormidas en instrucciones y reencarnación desconectada del programador de vidas y cortetes e intrínsicas equivocaciones de dolor y estancias conscientes atentos a la tantría de los hermanos y cognotaciones de proximidad en expansión seduciendo afines y maneras injertadas al crecido escruto advirtiendo el pasto de esclavitud y las infecciones en el interior del triunfo que relaja la compleja a nuevos estados del rápsoda y peajes y narradores de troya hacia parcas y seres sensibles de longitud akhásicos trasladados al don esquilo de herejías y controversias drenando némonas en honor a la combinación de apreciaciones de envejecidos distónicos como un ciclo de clientes y regiones acompañadas de excelencia dubitativa, o agesta de estelas del agrado universal, dirigido hacia el afán de poseer profudnidad y húmedo flujo de longevas informaciones.

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