
Ñeh Macario, guiñé u alcofarra desalougén, continuaré...pero no aquí, enjaulado con cada orgasmo circular; me tocás, te traga el reflujo, el día siguiente, incluso tu, pegado al cuerpo digital hasselblad y el artefacto aparte, como sellos, mafias, niñas, pipitas, popotes, deniése, yá escaparé mañana sin angustia, empezaré a volar con el nuevo caballito de feria, corre, no sentiré miedo, ni que me mata la vida poco a poco, ni que hay que hablar del diazepan, ni el que hay que repetir lo mismo, guiñeñé, veinte cincuenta, entradas antiguas, niebla, canciones, fotos, pus, bombachas, choacas, pero no mirás el miedo de colores, mil intentos de error de arcilla barata, fungus, humus, fingus, momentos que oxidan el tiempo y tragan guias y dátiles, morcilla, comas, penes u alcofarras volviendo a empezar; me tocas, luego el reflujo, mafias, niñas, pipitas, deniése, cremas de alcahuata, alocuentes, puzzle werids y un trocito de ganas de estructuras cleptómanas, ser cobarde, siamés, no le basta estar pegado a las tuyas, a tus respuestas también por mi, o por el sueño desequilibrado que ronda por esa cabecita llena de rumores de media noche; y todo recalca defectos necios, cerato, destruyes tu error, tus nostalgias incomprendidas, o si realmente vivo ensoñado por el pasado carcomido por cada pecado, se me confunden los de ahora, repiten, vuelan, soy yo el extraño extraterrestre dormido, moviéndome medio, ella quería excitación del fanatismo-error de la mísera profunda y como si quisiera a veces abrirla de piernas, de formigo, como superheroes, inmadurez de palabras, de esperas que no importan, atesoradas semillas que plantan lo de mañana para que crezca derecho, con mas sentido, y como si quisiera volver a sentir la mamada dormida, y cada pequeño moco con pus y púas interiores, y nata a la carta para logo el recuerdo que me deja este diminuto paisaje, como sea, hoy me enseñastes el recuerdo del miedo para que lo volviera a besar con mermelada de mariposa.
Comentarios