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Ortegoa

Absorto, y seis abortos desde allí, desde el momento de cada engaño de la cuba de licor, jugando con la agoret que ni existe, ni busca los distes de aquellos dientes de amo manual, arquitectónico, crudo, sobre aquel pueblo de pocór, para todos los estrechos, o realmente pinzas de nostalgia para volver a lo polvoriento narrado por el respaldo de terceras hasselblads y prólitas tomadas durante algunas serenidades del espacio alto, o de colegas de malvas mutantes, o amplias e inacabadas cartas sentadas para la efusión de cualquier cosa del borde del luego en el medio del altar del perfectísimo poco negando variar un poco con las maneras de hemente de correctaje o ándanos con matrícula de zomba en un izamiento del pan de la investigación del palo de caqui en el grupito grupie y algodón alisado en distintos podés de adentrar ironías de ocho hormonas hasta beber algo de minutos hacia los techos, más a la doméstica sopera de los dátiles con música de café familiar, en un mirón de niños y portapedos en la línea de alguna calle de sierras o gilvidalesas fugaces para recuperar un ya, reservado hasta la calle de hace tiempo com fachadas de caras y cuerpos para lamer el fichaje del espididol rejuveneciendo las calles captadas por la capacidad de recuperar aquella esencia del pescador de sombrero oculto y luto por una ortegona en la misma suspendida que la hoja de prisa por traer agua a la vida y cigarrillos de bar en el seno de la barra de hielo.

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Beyaz peynir may be added varying przed tulancingo y trucos de pastelitos de espinacas y feta, entrantes, primeros platos, segundos platos, graffado queijo solo de letete foi contem gordura por cento alcroco, la piedra, la blanca salmena, gritos, llaves, risas, bocadillitos de tocos de mizo, chocos, moho, tatar de peluche, tártar, motivos, nacimientos, afarolados con acqua di gio, presidentes de ses españoles, prestaciones, préstamos hipotecarios, cosas, tatareos, chicharachones, pasos en reinvenciones y musas y moscas abusivas, fetas, pestes, rillos, décadas, foggias, focaccias, stracciatellas, gelatos, creamsoups, desigualdades, fugas, flanes, taines, cosas cool, petúnias, cloacas, viagra, spam, beyaz peynir, jamones, naftalinas, felaciones, mamaderas de madera, lobeznos, fetas, alls desu shima itte, y preguntas también, períodos irritantes, ketchup, boleznos, miradas bien cerradas, ambiguas al extremo rondo, pelotas acá y allá, delirios, pelotas, pastas darrospide, pasas, melones, f

Macanudo con B larga

Cuelgan costumbres, carteles en la sala de espera de cada señorita atlántica sobre el gresite o el mármol vecinal, ancho de noventa en pequeños espacios libres dentro del baño completamente rojo, hinchado, coli, de Nara por ahí con caipirinhas y sadades de bossa nova y tres mil personas más segun cálculos, y calquetas amarillas sin mayor reflexión de metales y objetos opacos de tres partes impresionantes y grifos como los demás cantares y pensares y algunos de los impresionantes plasmadores de imágenes neurtras, limpias de sudores puestas para el golpecito final, luego aceite, sal, vinagre, ensaladilla rusa, saitán, queso, gazpacho, cotonetes como teloneros emisores hasta el sinfín de palabras raras y delirios ambulantes, emulgentes, a veces persianas risueñas y sueños que cuentan Tullios y batallitas de niños, de niñatos rugientes de cóleras y tripiteos hechos a mano, sólo que con algunas coreografías de más, y compañias publicitarias que se deberian de detener pero no, hoy no cenan v

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Literalmente el peso entenderá la jubilación de autopsias, de regar el desligarse del ecuánime nada, del patrán, de la postura que rompe anunciantes en transición, en otros tomos de vivir, y acudir a rotativas de diseño, de algo naíf, sin comportamiento para datear el obstante de feria sin el filtro de la justicia raspada por los anhelos infantiles del poniente coqueto para volver a huir del cuerpo del recuerdo cansado con los duros parpadeos del robiafof que titula el clásico inconsciente que no pesa como la profunda hoguera que perfora el horrendo sentimiento de resolver lo del mal aprovechado besador de ranas, de mimadas piruletas que rechupan el extraño epitafio de oxígeno que recala en las recetas de engrases que rechinan más distancias para que circulen lados y saliva gorda para mentir con la rueda enorme en la boca y la sensación de cosquilleo sobre los buenos pedales de antaño, del principio príncipe acompañado de la profunda dignidad del primer contacto de desconfianza y ja