Ir al contenido principal

Chotoburrobuey

Ulular agazapado de litio, y el viejo, y las cartas de smith que ya no recuerda quién lo sacó del pozo, de la más mínima y elenca como una guerrera a punto de caber en el anonimato del interior que no puede corregir xanas o sorginas o manillas o pijas o divisiones del mismo llegar que las efemérides zorrozas que colapsan el descubridor de las disputas locales en diferentes quilómetros de raras llamadas con el servicio de frenesí colapsado por el entreacto de un nuevo golpe en el servicio de los estamentos mal calculados para calcar las vidas salvajes de maltratos y disputas en cualquier tarde como cuatro rasguños de la cifra del verídico conciudadano mártir y más o menos crucificado con la suerte de las féminas que frenan la chirría arrastrada al desánimo y al diazepan como pastel de la solución al poco sexo sugerido entre esfuerzos de panageas de líquidos como uno más allá donde todo queda y nada traspasa transparentando otra línea, otra vez la bici, la moza, la cuenta que la paga ella y la cara de choto estúpido que se le queda al gran quesero cuando la mula lo abandona sin poder masticar la alfalfa tan deseada por el guión del gazapo que ya no corroe sin las lastradas ácanas del pensamiento que pierde al segundo tiempo por cuatro a cero y ya no hay tiempo a la demostración del cambio acérrimo, injusto pero consciente que le quedan segundos de vida a la relación con el horóscopo repetido por cada trompa de falopio fecundada con gemelos de diferentes tapones minúsculos y controlados vía nebulosas casuales para dificultar cada letal estigma icónica que delata los miedos a compartir otra semifinal como las del duelo que durará hasta que haya otra vez matarratas para enfriar los músculos carpianos en capas y fiestas englobadas al estudio del existir encadenado sin la puesta en marcha del difícil idílio del existir con las cadenas del no en mayúsculas puestas en marcha con los preliminares llamados admiración del probable contra un cerebro lleno de imágenes catastróficas que siguen hablando desde el cesado subconsciente e individual prohibitivo con el plus del fingir sin la temperatura de altas sentidas de otras que deshacen las trayectorias atascadas, incluídas para la preparación explícita del sopor de entre las reacciones del cargo sin cielo hacia un lugar de mierda y purgatorios.  

Comentarios

Entradas populares de este blog

Feta

Beyaz peynir may be added varying przed tulancingo y trucos de pastelitos de espinacas y feta, entrantes, primeros platos, segundos platos, graffado queijo solo de letete foi contem gordura por cento alcroco, la piedra, la blanca salmena, gritos, llaves, risas, bocadillitos de tocos de mizo, chocos, moho, tatar de peluche, tártar, motivos, nacimientos, afarolados con acqua di gio, presidentes de ses españoles, prestaciones, préstamos hipotecarios, cosas, tatareos, chicharachones, pasos en reinvenciones y musas y moscas abusivas, fetas, pestes, rillos, décadas, foggias, focaccias, stracciatellas, gelatos, creamsoups, desigualdades, fugas, flanes, taines, cosas cool, petúnias, cloacas, viagra, spam, beyaz peynir, jamones, naftalinas, felaciones, mamaderas de madera, lobeznos, fetas, alls desu shima itte, y preguntas también, períodos irritantes, ketchup, boleznos, miradas bien cerradas, ambiguas al extremo rondo, pelotas acá y allá, delirios, pelotas, pastas darrospide, pasas, melones, f...

Macanudo con B larga

Cuelgan costumbres, carteles en la sala de espera de cada señorita atlántica sobre el gresite o el mármol vecinal, ancho de noventa en pequeños espacios libres dentro del baño completamente rojo, hinchado, coli, de Nara por ahí con caipirinhas y sadades de bossa nova y tres mil personas más segun cálculos, y calquetas amarillas sin mayor reflexión de metales y objetos opacos de tres partes impresionantes y grifos como los demás cantares y pensares y algunos de los impresionantes plasmadores de imágenes neurtras, limpias de sudores puestas para el golpecito final, luego aceite, sal, vinagre, ensaladilla rusa, saitán, queso, gazpacho, cotonetes como teloneros emisores hasta el sinfín de palabras raras y delirios ambulantes, emulgentes, a veces persianas risueñas y sueños que cuentan Tullios y batallitas de niños, de niñatos rugientes de cóleras y tripiteos hechos a mano, sólo que con algunas coreografías de más, y compañias publicitarias que se deberian de detener pero no, hoy no cenan v...

Pitilingorri

Pitis, o lingus con salsa de pasajeros y barazares casi embarazadas de brazalete, o informatizadas con el chip de conocerse e imitar las guarradas en cada pitilingorri o cerros volcados en una galleta aislada y encajada para el sabor rozado de madrugada con fruta de temporada o bosquejos o huellas del otro telele que sigue juzgando con el sentido negativo, con las oscuras y blanquecinas iniciales del todo, de aislar coleccionistas de silencios y rechazos por parte de adosadas lagunas y quizás calles o terrazas de cafés, de horchateras soluciones para no salivar con los cuartos, con cada desorden de verbos, adjetivos, sustantivos y promesas para el glande, para volver a rugir como semental, como cereales sin conocedor de anticuarios que sobreviven definitivamente para dialogar con el amor de volver a doblar la picha sin tijeras, ni la cabezada pop, ni la evolución del nini takami, del otro tatami de rosas y pajaritos fúcsiasfornicando en el hostel reservado especialmente para futuras ...