Ir al contenido principal

Eunuco

Nunca en las barras, en enunciar la pipirana de zeus, de la ida como mono de colonia y fragatas de otónomas en el retorno de la mala temporalidad del mejunje tras el mal de ojo de la miniserie del eurismo central del balneario en los jámines del jazmín en cervezas turcas y algún que otro foundant del sinoque de felaciones, de mai tai sin alcohol negro ni falditas escocesas de cuadros, de fraiolis sobre la sultana que continúa interviniendo en las relaciones del árduo torneo de promocionales anuncios del esbozo que no compone crímenes ni bienes para el condado de huellas dactilares entre hojas de cebolla, de cálculos y las cajas de bébek niní, de cada bostana que se anuncia con las fans del naufragio en vedas que toman por el ejemplo del lujo sin hipoteca, de ahí con halajabas y viajeros de la diligencia de un viejo oeste imaginario que opera en futuras entrevistas para la cabeza de cada bruja con imágenes de pistolas y aciertos y escasas dejadeces secretas esperando las arbitrarias dadas a conocer por tres como especiales de argento, de especies y profecías próximas para el don estupefacto y casi estupendo entrado en las diez y doce, o como dieciocho crespones de lino con las tres empuñaduras de las inmejorables vistas que ahora son borrosas y sin la betagé ni la alfafé que no quieren seguir diciendo el nombre por si las llorosas entradas interrumpen las malas narraciones del explicar, de los juanetes y números de cada encuadre para el plasmo, para versos de dos en cuatro, en palabras, en caballos sementales que vuelan con el viento, sin su peso de alguna tona de más; del herraje, del hereje hecho a medida del miedo, del sueño, de los anuncios que finiquitan el rádio en colaboración al si está bien como un rubio haikú de no más de diez palabras y números y katakanas para el otro témpole de las segundas oportunidades que se desviven para el éxito sólo de amar al sin pagar, al superhéroe sin el ser ni de cartón ni de los meses y medio posteriores que se auguran también difíciles si no aparece de la nada como la mágia de hacer volar fuego y ensaladas caprese con caracoles y algunas algas de foie y papel de fumar como degustación de reconocer los agobiados rencores del rincón.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Feta

Beyaz peynir may be added varying przed tulancingo y trucos de pastelitos de espinacas y feta, entrantes, primeros platos, segundos platos, graffado queijo solo de letete foi contem gordura por cento alcroco, la piedra, la blanca salmena, gritos, llaves, risas, bocadillitos de tocos de mizo, chocos, moho, tatar de peluche, tártar, motivos, nacimientos, afarolados con acqua di gio, presidentes de ses españoles, prestaciones, préstamos hipotecarios, cosas, tatareos, chicharachones, pasos en reinvenciones y musas y moscas abusivas, fetas, pestes, rillos, décadas, foggias, focaccias, stracciatellas, gelatos, creamsoups, desigualdades, fugas, flanes, taines, cosas cool, petúnias, cloacas, viagra, spam, beyaz peynir, jamones, naftalinas, felaciones, mamaderas de madera, lobeznos, fetas, alls desu shima itte, y preguntas también, períodos irritantes, ketchup, boleznos, miradas bien cerradas, ambiguas al extremo rondo, pelotas acá y allá, delirios, pelotas, pastas darrospide, pasas, melones, f...

Macanudo con B larga

Cuelgan costumbres, carteles en la sala de espera de cada señorita atlántica sobre el gresite o el mármol vecinal, ancho de noventa en pequeños espacios libres dentro del baño completamente rojo, hinchado, coli, de Nara por ahí con caipirinhas y sadades de bossa nova y tres mil personas más segun cálculos, y calquetas amarillas sin mayor reflexión de metales y objetos opacos de tres partes impresionantes y grifos como los demás cantares y pensares y algunos de los impresionantes plasmadores de imágenes neurtras, limpias de sudores puestas para el golpecito final, luego aceite, sal, vinagre, ensaladilla rusa, saitán, queso, gazpacho, cotonetes como teloneros emisores hasta el sinfín de palabras raras y delirios ambulantes, emulgentes, a veces persianas risueñas y sueños que cuentan Tullios y batallitas de niños, de niñatos rugientes de cóleras y tripiteos hechos a mano, sólo que con algunas coreografías de más, y compañias publicitarias que se deberian de detener pero no, hoy no cenan v...

Pitilingorri

Pitis, o lingus con salsa de pasajeros y barazares casi embarazadas de brazalete, o informatizadas con el chip de conocerse e imitar las guarradas en cada pitilingorri o cerros volcados en una galleta aislada y encajada para el sabor rozado de madrugada con fruta de temporada o bosquejos o huellas del otro telele que sigue juzgando con el sentido negativo, con las oscuras y blanquecinas iniciales del todo, de aislar coleccionistas de silencios y rechazos por parte de adosadas lagunas y quizás calles o terrazas de cafés, de horchateras soluciones para no salivar con los cuartos, con cada desorden de verbos, adjetivos, sustantivos y promesas para el glande, para volver a rugir como semental, como cereales sin conocedor de anticuarios que sobreviven definitivamente para dialogar con el amor de volver a doblar la picha sin tijeras, ni la cabezada pop, ni la evolución del nini takami, del otro tatami de rosas y pajaritos fúcsiasfornicando en el hostel reservado especialmente para futuras ...