Nefnamun

Diálogos, fracasos para un lunes de una fortuna sucia de idas del ahora para piedra, de la manera que sean pastillas para leer mierda del infierno enciclopédico que volverá al quemar neuronas y hormonas hasta que llegue la mágica de aquella química que intimida las cosas que no fluyen por la sombra del deletrear áspero, ambiguo, enjaulado en los estrechos privados de otro musculoso festín documentalista que hereda el pozo profundo del matrimonio de relatos y aniversarios descatalogados por otro rol sin la excepción de especular con la media hora de acumulación de objetivismos optimizados solamente cuando aparecen las amenazas con el riesgo de alargar la curada agonía del fuerte diésel Que se pega con el floïd del viejo arlequín de las cartas enroscadas con cada vinculación con la testosterona de la capacidad de volver a ganar a la ficción sentida con la habilidad del esbozo contra un cambio que corre a favor del parado perruco menos directo que el fútbol espontáneo entre espacios extracomunitarios como límite que pide salvajes besos y metáforas para reciclar los años que no se ven por culpa del alentido plantado con la crónica sin afinidades ni pinturas muertas en el museo del penalti suave, desplazado hasta la seguridad de ella que parece que besará la época de las amapolas de un terreno sin manos de fondo en las fotos públicas y comerciales de un valor para el fanatismo de lo artístico que ya maravilla quedando fuera del bar, de la croqueta por leer en términos creativos de detrás del papel de sociolizador de un gran escote de franela cargadita de almidón y contextos saciados del sexo  rápido que refugia los uniformes de biomecánicas situaciones coordinadas con la razón de la natura interceptada por cada elevado beneficio de haber establecido la razón en las diferentes huídas hacia la guerra con el contexto ya recuperado y los valores y botas más naturales que las administraciones de oficinismos como los que quieren el culo y lo rezan para que llegue virgen, ya con la acción de no desesperar con el pensamiento de la anticipación fuera del foco duro puesto en el garantizado para añadir otra veterana penetración convertida en contragolpe incapaz de entender la reemitida fractura de facturación de la reciente sensación o en pocas palabras, olores del legado expectando a las inabastables provocaciones.