Ir al contenido principal

Charm

March, indescifrable despensa de insatisfechas en legado y troubé de charm, cerca de las innecesarias juntas injustas, de cola y querellas y gletas chillantes ondeando hacia la porcelana del recentro abierto parcialmente, y lágrimas, y un puño de hierbabuena y tomillo para el lado del comer consumido en el pedazo de chorros de hundos de charil y esperma y espuelas para el desayuno de la tarde en literatos lacios en el hueco de los muslos para llegar al pandero con la casita de árbol, de la cama deshecha mientras sigua la pregunta de la misma angustia que el motivo fiel rompéndose para reescribir el primigenio de tono coral con helado de vainilla y virutas derritidas para succión del váguido al sabor más largo del rosado hasta el hoy en forma de muralla, de torso eclipsado por el maniquí entre las manos y el éxito con ínfulas del fecundador de todo, del cualquier marzo, del doquier,del jócker, de la jota dedicada a la edad del ojo, a la galleta vecunda, vecinda, de nuevo al asombro carmesí, a la náusea, a la incontinencia del presupuesto de la última nómina que vendió finísimos vencados del fatalismo que corona la vigía respingada con gracia y alambres y carcasas al arriate desapercibido por el garbo inspirado en la entonces importada albada por la reforma del rostro devorando el sueldo del salarrué de biblioteca medio a la plaza de las gitanas que absorben la tranquilidad del intrecto parecido a mosquitos y lluvia y dedicatorias de seguidores hambrientos de sexo y rezos para encontrar la paradisíaca flecha para el nuevo romance entre el bicho externo y la simbiosis de los cuerpos del amor que corrige el fracaso de cambiar los resultados y los parches para parar el perfume de tal cuerpo, con tal fermona de ángel y pasado charm a tal convite de equilibro encantado de tal, de juntar besos y obras maestras de un nuevo kamasutra tántrico, precisando desordenados momentos inflingidos en borracheras y pedos y virundelas de caché de supermercado y reservas de pena para morir como cielo o piel o invernaderos de libros argentinos con toda confianza de tronos que bajan del tono, de la tensión del giro garrafal que abre pecos de miel y púrpura corrosión en la memoria.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Feta

Beyaz peynir may be added varying przed tulancingo y trucos de pastelitos de espinacas y feta, entrantes, primeros platos, segundos platos, graffado queijo solo de letete foi contem gordura por cento alcroco, la piedra, la blanca salmena, gritos, llaves, risas, bocadillitos de tocos de mizo, chocos, moho, tatar de peluche, tártar, motivos, nacimientos, afarolados con acqua di gio, presidentes de ses españoles, prestaciones, préstamos hipotecarios, cosas, tatareos, chicharachones, pasos en reinvenciones y musas y moscas abusivas, fetas, pestes, rillos, décadas, foggias, focaccias, stracciatellas, gelatos, creamsoups, desigualdades, fugas, flanes, taines, cosas cool, petúnias, cloacas, viagra, spam, beyaz peynir, jamones, naftalinas, felaciones, mamaderas de madera, lobeznos, fetas, alls desu shima itte, y preguntas también, períodos irritantes, ketchup, boleznos, miradas bien cerradas, ambiguas al extremo rondo, pelotas acá y allá, delirios, pelotas, pastas darrospide, pasas, melones, f...

Macanudo con B larga

Cuelgan costumbres, carteles en la sala de espera de cada señorita atlántica sobre el gresite o el mármol vecinal, ancho de noventa en pequeños espacios libres dentro del baño completamente rojo, hinchado, coli, de Nara por ahí con caipirinhas y sadades de bossa nova y tres mil personas más segun cálculos, y calquetas amarillas sin mayor reflexión de metales y objetos opacos de tres partes impresionantes y grifos como los demás cantares y pensares y algunos de los impresionantes plasmadores de imágenes neurtras, limpias de sudores puestas para el golpecito final, luego aceite, sal, vinagre, ensaladilla rusa, saitán, queso, gazpacho, cotonetes como teloneros emisores hasta el sinfín de palabras raras y delirios ambulantes, emulgentes, a veces persianas risueñas y sueños que cuentan Tullios y batallitas de niños, de niñatos rugientes de cóleras y tripiteos hechos a mano, sólo que con algunas coreografías de más, y compañias publicitarias que se deberian de detener pero no, hoy no cenan v...

Pitilingorri

Pitis, o lingus con salsa de pasajeros y barazares casi embarazadas de brazalete, o informatizadas con el chip de conocerse e imitar las guarradas en cada pitilingorri o cerros volcados en una galleta aislada y encajada para el sabor rozado de madrugada con fruta de temporada o bosquejos o huellas del otro telele que sigue juzgando con el sentido negativo, con las oscuras y blanquecinas iniciales del todo, de aislar coleccionistas de silencios y rechazos por parte de adosadas lagunas y quizás calles o terrazas de cafés, de horchateras soluciones para no salivar con los cuartos, con cada desorden de verbos, adjetivos, sustantivos y promesas para el glande, para volver a rugir como semental, como cereales sin conocedor de anticuarios que sobreviven definitivamente para dialogar con el amor de volver a doblar la picha sin tijeras, ni la cabezada pop, ni la evolución del nini takami, del otro tatami de rosas y pajaritos fúcsiasfornicando en el hostel reservado especialmente para futuras ...