Ir al contenido principal

Nedálnerawbs

Nedálnero en viceversa, anónima e inflamada tras varios traspiés de papel mojado con garabatos de petate en blanco con estaciones de paso y memoria opaca todavía sin el tal vez de los días que vuelven a ofrecer desinteresadamente las pátinas de miedos prácticamente intactos y desinteresadamente recorriendo la luz nítida, los pasos agudos la ramadasa de snatam o el satanama de la página principal de la serpiente clavada en otra porción consumida con el dulzón hasta decidir las hojas que enturbian ausencias y sutanas y mortajas de pequeñas pesadillas de realidad en el rostro de la locura besado por la suerte extrema, del jaurío encanto de otra mañana cansada estrenada en el grumete como riancho moreno, en disolventes esclavos del soy, del dedal para rechazar otro indígena, candidato al abarrote con la vehemencia de granear un punto de microalgas en otra zona de epidemias  y dermis de dulces gofres de ensaimadas ensanchadas por otro hueco de pote, de tres tostas de oferta para cualquier salto de cama embravecido con selecto satín de olor a maratones y noches del vaivén en cuerpos femeninos y rayos solares y fotografía pronudista desde menores cámaras furtivas para cambiar a ambos rediles de ocupación, de carteles para confeccionar nuevas nalgas y retos y pespuntes con tapetío de hummus y detalles para el próximo recorrido al txatxiki de menos fines de semana que la probablemente fritada de costras y costeñas de queso azul y piquillo desde la cuenta atrás como aceptando para dejar otro préstamo en el cajón roto por la parte intuitiva del tanto intranquilo y doloroso a pie desvanecido y quizás anoréxico, como débil y sin orientación hacia otro traslado entero, enfermo de humor como un cambio vuelto para amargar el por semana de sugestión, de como la mayoría no colabora en ofertas optadas del briefing y marcadas por el temor al no, a la presencia en un principio de ansiedad, a ciertas anticipadora para bastar con la manada aparente.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Feta

Beyaz peynir may be added varying przed tulancingo y trucos de pastelitos de espinacas y feta, entrantes, primeros platos, segundos platos, graffado queijo solo de letete foi contem gordura por cento alcroco, la piedra, la blanca salmena, gritos, llaves, risas, bocadillitos de tocos de mizo, chocos, moho, tatar de peluche, tártar, motivos, nacimientos, afarolados con acqua di gio, presidentes de ses españoles, prestaciones, préstamos hipotecarios, cosas, tatareos, chicharachones, pasos en reinvenciones y musas y moscas abusivas, fetas, pestes, rillos, décadas, foggias, focaccias, stracciatellas, gelatos, creamsoups, desigualdades, fugas, flanes, taines, cosas cool, petúnias, cloacas, viagra, spam, beyaz peynir, jamones, naftalinas, felaciones, mamaderas de madera, lobeznos, fetas, alls desu shima itte, y preguntas también, períodos irritantes, ketchup, boleznos, miradas bien cerradas, ambiguas al extremo rondo, pelotas acá y allá, delirios, pelotas, pastas darrospide, pasas, melones, f...

Macanudo con B larga

Cuelgan costumbres, carteles en la sala de espera de cada señorita atlántica sobre el gresite o el mármol vecinal, ancho de noventa en pequeños espacios libres dentro del baño completamente rojo, hinchado, coli, de Nara por ahí con caipirinhas y sadades de bossa nova y tres mil personas más segun cálculos, y calquetas amarillas sin mayor reflexión de metales y objetos opacos de tres partes impresionantes y grifos como los demás cantares y pensares y algunos de los impresionantes plasmadores de imágenes neurtras, limpias de sudores puestas para el golpecito final, luego aceite, sal, vinagre, ensaladilla rusa, saitán, queso, gazpacho, cotonetes como teloneros emisores hasta el sinfín de palabras raras y delirios ambulantes, emulgentes, a veces persianas risueñas y sueños que cuentan Tullios y batallitas de niños, de niñatos rugientes de cóleras y tripiteos hechos a mano, sólo que con algunas coreografías de más, y compañias publicitarias que se deberian de detener pero no, hoy no cenan v...

Pitilingorri

Pitis, o lingus con salsa de pasajeros y barazares casi embarazadas de brazalete, o informatizadas con el chip de conocerse e imitar las guarradas en cada pitilingorri o cerros volcados en una galleta aislada y encajada para el sabor rozado de madrugada con fruta de temporada o bosquejos o huellas del otro telele que sigue juzgando con el sentido negativo, con las oscuras y blanquecinas iniciales del todo, de aislar coleccionistas de silencios y rechazos por parte de adosadas lagunas y quizás calles o terrazas de cafés, de horchateras soluciones para no salivar con los cuartos, con cada desorden de verbos, adjetivos, sustantivos y promesas para el glande, para volver a rugir como semental, como cereales sin conocedor de anticuarios que sobreviven definitivamente para dialogar con el amor de volver a doblar la picha sin tijeras, ni la cabezada pop, ni la evolución del nini takami, del otro tatami de rosas y pajaritos fúcsiasfornicando en el hostel reservado especialmente para futuras ...