Ir al contenido principal

Kjezñona

Ézños, de esos esbozos de un ocho dos de cada, de las baldías de señales que se ausentan en condenados habitáculos viriles de indios de rojo, apenas nútrias, o almenos parecido a las maricopas debajo del vergel, del mójave rendido en la ratacada de emociones que comentan la tremenda acción en busca de ideas de política por la tirada noche sin fé, sin la matutina dúa de estupefacientes que se escapan por el rostro en forma de un punto G diferente al de la musa que subasta el rostro para el segundo que masca el dedo de la segunda fulana sin el radar del sigan metiendo, pero sin eyacular en la gola del lobo, del negro mundo ancestral de los ojos que no se conocen ni compran la tela para callejeos y tiendas y crayolas para chupar el menú del país y las colas de comunitarios bombones de foie estancados en la vez para firmar las cajas cojas de curiosas continuadas, cercanas a algunos comentarios de untar el salmón en la tosta de tardanas chapas fuera de la marca de inmuebles que tira y gana otra marca, otra expresa a la contraria habitual de postales e historias de encontrar la bajada de meretrices donde comer, donde abordar la experiencia del don rápido i manejable con la cola de la farmacéutica con lenceria y media cola de novia aprovechada por el enredo del elástico de noche, como para rellenar almenos dos veces el futuro con los actos y desgracias del presente que tanto ansía el querido facesit de cuna y criadero del extravagante encanto pere oler el erizo del ricito de pasta con polenta y cualquier noche hermosa que se traga con la explosión del espectáculo que respira la voz sensual de la noche sin tocadiscos y con lobos en la vera que nadie escribe y corre como algo breve dentro de la emisión de copisa y tetas y copisterías para fotocopiar la conversación del conocido paranormal que resume varias novedades entradas en otro cuarto oscuro dormido enre los líquidos y papeles para pensar en el terco del cómic y ventolas que tensan el parto con las lactantes al bucle de aceptar la enfermedad del despliegue práctico del boceto que manda para la tromba de gasolina que impulsa al disco para facilitar la vida que marquina en la natural habada de entretenimientos y promesas promíscuas de butelos y pretéritos de deportes y lagunas en sepia para crueldades y timbas sin cariño del tuzar de pata negra y filos de jergas sulfatadas con las razones del paupérrimo forzar la siguiente basculante que abanica el líbido deseo de abanicar el comportamiento hacia el nuevo portical sin dones ni chamosos en el lombro calado de pasar a la azumara y fumar motos de bogavante.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Feta

Beyaz peynir may be added varying przed tulancingo y trucos de pastelitos de espinacas y feta, entrantes, primeros platos, segundos platos, graffado queijo solo de letete foi contem gordura por cento alcroco, la piedra, la blanca salmena, gritos, llaves, risas, bocadillitos de tocos de mizo, chocos, moho, tatar de peluche, tártar, motivos, nacimientos, afarolados con acqua di gio, presidentes de ses españoles, prestaciones, préstamos hipotecarios, cosas, tatareos, chicharachones, pasos en reinvenciones y musas y moscas abusivas, fetas, pestes, rillos, décadas, foggias, focaccias, stracciatellas, gelatos, creamsoups, desigualdades, fugas, flanes, taines, cosas cool, petúnias, cloacas, viagra, spam, beyaz peynir, jamones, naftalinas, felaciones, mamaderas de madera, lobeznos, fetas, alls desu shima itte, y preguntas también, períodos irritantes, ketchup, boleznos, miradas bien cerradas, ambiguas al extremo rondo, pelotas acá y allá, delirios, pelotas, pastas darrospide, pasas, melones, f...

Macanudo con B larga

Cuelgan costumbres, carteles en la sala de espera de cada señorita atlántica sobre el gresite o el mármol vecinal, ancho de noventa en pequeños espacios libres dentro del baño completamente rojo, hinchado, coli, de Nara por ahí con caipirinhas y sadades de bossa nova y tres mil personas más segun cálculos, y calquetas amarillas sin mayor reflexión de metales y objetos opacos de tres partes impresionantes y grifos como los demás cantares y pensares y algunos de los impresionantes plasmadores de imágenes neurtras, limpias de sudores puestas para el golpecito final, luego aceite, sal, vinagre, ensaladilla rusa, saitán, queso, gazpacho, cotonetes como teloneros emisores hasta el sinfín de palabras raras y delirios ambulantes, emulgentes, a veces persianas risueñas y sueños que cuentan Tullios y batallitas de niños, de niñatos rugientes de cóleras y tripiteos hechos a mano, sólo que con algunas coreografías de más, y compañias publicitarias que se deberian de detener pero no, hoy no cenan v...

Pitilingorri

Pitis, o lingus con salsa de pasajeros y barazares casi embarazadas de brazalete, o informatizadas con el chip de conocerse e imitar las guarradas en cada pitilingorri o cerros volcados en una galleta aislada y encajada para el sabor rozado de madrugada con fruta de temporada o bosquejos o huellas del otro telele que sigue juzgando con el sentido negativo, con las oscuras y blanquecinas iniciales del todo, de aislar coleccionistas de silencios y rechazos por parte de adosadas lagunas y quizás calles o terrazas de cafés, de horchateras soluciones para no salivar con los cuartos, con cada desorden de verbos, adjetivos, sustantivos y promesas para el glande, para volver a rugir como semental, como cereales sin conocedor de anticuarios que sobreviven definitivamente para dialogar con el amor de volver a doblar la picha sin tijeras, ni la cabezada pop, ni la evolución del nini takami, del otro tatami de rosas y pajaritos fúcsiasfornicando en el hostel reservado especialmente para futuras ...