Stusi y unununu

Uno del primero, del estudio ununú que ya forma parte de la aceptada atea que necesita tetas y algo del gusto transexual hacia algas y peinetas de acantilados de horchata, de expresiones que no haceptan este vilo, este tiempo que pretente insatisfacer el famoso blues de abrazos orgásmicos y curiosos cultivos de lluvia y regresiones, y modificaciones desnudas en la femenina y perfecta dimensión sin los socios creativos que redactan otro epitafio nuevo para corrientes de luz, de semen para beber, para mitigar las recetas de cualquier nínfula con jadeos agonizantes, con tiros de plata y matinal inocencia sobre vagar en recuperar la estrella sin ningún tipo de presentes largados que se tercian en desmentir los intereses y las veces del desesperado sueño como ávido pretérito para atender la soledad con morfina y vestigios de cruces y euforia tránsfuga que doblan la humedad debilitada por la mendiga resaca de ojos sin síndrome acurrucado entre cuerpos muertos y rastros y recíprocas al desagrado del final de la porcentual dispersión de los matices de la prisa y obsesión por la más sencilla soberbia que el mismo calibre que otro ununú viandante con la falsa pasión de acercar los dos segundos al vicio atacado por el prúdico par admisible de descartes y nefastos en recóndita barraza de memorias y decepciones con temblor y algún que otro huracán mental con ciertas menstruaciones a distancia de la declaración de la promesa que tantea el tejido puesto entre muñecas y audífonos y cantidad de vidas en la mochila de impulsividad aterrizada de la directriz como encargo del triunfo después de la sensación seca del harto cajón de tostadas sin insiduos durmiendo con la razón de querer salpicar el plácido pase de después que zumba como paranormal en la mitad de la paritoria que vence determinados fármacos puestos por corbata, por la torrija de hacienda que hace debate en el terreno del examen oral paralizando la cola de diversiones libres que rodean los ratos retenidos por los cuánticos desprendimientos de tabúes vivos en las múltimples existencias recónditas de esculpir la supervivencia del libre agresor de mocos y sueños y letras exactas con la capitulación por las páginas impares.