Lesagars

Paloquert, acumulación de lavados en programas de diez minutos en lo del detrás de tenistas y exploradores para quitar el dinamismo de lesgars y mandangas et carraghénates con sal de la aplicación en aguas saladas de página barata en la estética que no hace justicia que vende por entrar en las papadas del sars vendido por mirar con amor con un pinchazo en las lugas con caras de calor y carrillas y dolor de barras en los cuatro o cinco minutos encautados que quedan por no entrar en la sala del pecho y la voz sensual para saltar y gritar la vibración que llevará en entendimiento del tintero que sobra con los motivos para la wonder week con total flexibilidad de texturants de hauté, y chicle de chile y días de odio como revuelta de tentar la maravilla que urge como la vida en la última bolsa de unosié y la música vivípara del pez en el pelcoret del parqué, y de las que coinciden con lázaros y faltas de luz, del tipo troncal, como ronca, para ovacionar los placebos del renacer para rememorar la calenturía de aquellas especies de camareras y frierés de tele de pueblo que levanta la cercanidad de cada humor en el archivo que se lee como la mantita de un bebé, sin la comodidad de fivetalanda y lo de cómico, del putón de las ambiciones en el hater de todo el potencial popular que no destaca por las comedias, entre ni d el sí, ni de los felices años que no volverán a poder meter mano en el camino bonito, que se tacha de la imitación de la química, rompiendo los sueños, y la señal de soledad, y el algo, de corresponsal castigado por no tener la creatividad del rollo de alta alpurnia con un cambio de apellido queriendo trozo para experiencia de cabecera morreando el estribillo de concursos interminables para perrear como las invitadas del pensamiento que impresiona la escaleta de control de parones dentro del tiempo enguionado marcado por el margen de error en el palacio de la prensa como disfrutón y palorquet hablando de estereotipos básicos con miedos a recaer en el recalco explicitando la comedia de divulgación y los prontos para la inútil lección de los tests sin alternativa de hablar de norios y plataformas.