Ir al contenido principal

Sarterintisca

Satré de sartenes y productos de repuestos y cáducas inspiraciones del desmontaje del destino que supera la melodía del mediodía prolífica de ilusiones recién cumplidas y bajar a componer con la mortaja en la cara del comprometido esperando la vasta línea emocional que compone cada poroto de diazepan, antes un poco de grappa con limón para lubricar el cerebro, para dormir con el cerezo entre manos y las fotocopias de los recursos amputados en la otra férula del puro éxito que degolla el pánico de ceder las hojas de trámites que parecían de algun gasto de licántropos y cavallos con tacones de la vecina y asagajos lejanos de antonomasia y testamentos a cargo de los fagocitos calcinantes que desgranan la hora de agotamiento de la resonancia del fanatismo que se arquea en el suelo con el difunto y los retortijones y sudores de la agonía que se siente en la presentación del verano y del bietzshe en el hermano de la latitud curiosa dándose finalmente con los surcos del fondo de un ajibe erizado de testigos y criollos sacados de cada sinergia que pasa por las neuronas satinadas, como las alas espirituales que se ven en la tos del mismo extraño, y la extraña intrincada de títulos y mierdas de la trastienda en voz del insatisfecho que promete un futuro con orgías y traducciones rodeadas de cualquier nota frazada de varias veces y sábanas de la periférica en el húmedo rincón de las ratas sincronizadas con el físico de niño atrapado en homologarse el suicidio que altera la correa de fungi mueca de desdén y cogollos y sementales para comentar la sincronía roja con la obligación de fotografiar la tongue del batido de amor instantáneo y oscura velocidad de la muerte que arranca para devenir en la misma boda de lo inesperado que se pierde entre neones y lolas para freir en la primera boca de elementos y ganado del resto de productos retro que avecinan la no compañía como la miel circunstancial y la soltura eterna de otras musas capaces de componer nanas graznando en su forma más animal del discazo de escucha y traslado del montón de logros a la papelera claustrofóbica relatada por la lira encendida con la poca confianza en ciertas premisas inseguras y mitrocóndrias más ásperas que la canción que se repite del partido de la derrota que no puede pasar a la fase del ritmo del divorcio con la vida.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Feta

Beyaz peynir may be added varying przed tulancingo y trucos de pastelitos de espinacas y feta, entrantes, primeros platos, segundos platos, graffado queijo solo de letete foi contem gordura por cento alcroco, la piedra, la blanca salmena, gritos, llaves, risas, bocadillitos de tocos de mizo, chocos, moho, tatar de peluche, tártar, motivos, nacimientos, afarolados con acqua di gio, presidentes de ses españoles, prestaciones, préstamos hipotecarios, cosas, tatareos, chicharachones, pasos en reinvenciones y musas y moscas abusivas, fetas, pestes, rillos, décadas, foggias, focaccias, stracciatellas, gelatos, creamsoups, desigualdades, fugas, flanes, taines, cosas cool, petúnias, cloacas, viagra, spam, beyaz peynir, jamones, naftalinas, felaciones, mamaderas de madera, lobeznos, fetas, alls desu shima itte, y preguntas también, períodos irritantes, ketchup, boleznos, miradas bien cerradas, ambiguas al extremo rondo, pelotas acá y allá, delirios, pelotas, pastas darrospide, pasas, melones, f...

Macanudo con B larga

Cuelgan costumbres, carteles en la sala de espera de cada señorita atlántica sobre el gresite o el mármol vecinal, ancho de noventa en pequeños espacios libres dentro del baño completamente rojo, hinchado, coli, de Nara por ahí con caipirinhas y sadades de bossa nova y tres mil personas más segun cálculos, y calquetas amarillas sin mayor reflexión de metales y objetos opacos de tres partes impresionantes y grifos como los demás cantares y pensares y algunos de los impresionantes plasmadores de imágenes neurtras, limpias de sudores puestas para el golpecito final, luego aceite, sal, vinagre, ensaladilla rusa, saitán, queso, gazpacho, cotonetes como teloneros emisores hasta el sinfín de palabras raras y delirios ambulantes, emulgentes, a veces persianas risueñas y sueños que cuentan Tullios y batallitas de niños, de niñatos rugientes de cóleras y tripiteos hechos a mano, sólo que con algunas coreografías de más, y compañias publicitarias que se deberian de detener pero no, hoy no cenan v...

Pitilingorri

Pitis, o lingus con salsa de pasajeros y barazares casi embarazadas de brazalete, o informatizadas con el chip de conocerse e imitar las guarradas en cada pitilingorri o cerros volcados en una galleta aislada y encajada para el sabor rozado de madrugada con fruta de temporada o bosquejos o huellas del otro telele que sigue juzgando con el sentido negativo, con las oscuras y blanquecinas iniciales del todo, de aislar coleccionistas de silencios y rechazos por parte de adosadas lagunas y quizás calles o terrazas de cafés, de horchateras soluciones para no salivar con los cuartos, con cada desorden de verbos, adjetivos, sustantivos y promesas para el glande, para volver a rugir como semental, como cereales sin conocedor de anticuarios que sobreviven definitivamente para dialogar con el amor de volver a doblar la picha sin tijeras, ni la cabezada pop, ni la evolución del nini takami, del otro tatami de rosas y pajaritos fúcsiasfornicando en el hostel reservado especialmente para futuras ...