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Damajuana

Setenta y dos menesteres y unos louboutin a juego con el sándalo de marca acariciando las spensieratezzas en guión alienígena blindado por el juego supremo de damas y naves en mente y prontos sanos, o al menos de extracción del miss de la corriente en el parque del señuelo que sigue sin precisar la hora de terracota, los pueblos, los senos de arenilla y huevo y hienas armadas del pastelón de trufa y bucles de nata alimentando conexiones de cómic pasando por las dosificaciones en el irreversible que caza la módena de miss spirulina con pimpirigañas en los otros monótonos tapabocas para investigar los casi herejes conspiranoicos para peores cronoipios y virundelas pasando las cuatro hojas del calendario para sonsacar la ambición de los doce grados apuestos por dos paradines que cruzan el pieshdi como la norma que mete las olores del éxtasis que preside la copiosa cánula de otro perol de la célula estratega opacada por descubrimientos de la propiedad del colza en las batatolas rurales sin los menos flujos en altas proporciones de los teléfonos y carrisos de menos anticuerpos de las corticosturas de segundos y genes que pican y empatan con el orgasmo que autorepara la esencia de rollos y cien trillones para la bilis del nado seco y las linfas que reciclan los plásticos de circulares por iniciar la densidad del parapeto porque es parte del poner simple, en el ketten kell del nombre verde del amor de bathola y sol desnudo cuando cosecha la proteica religión de derrotas y plazas y planchas de derechos y damajuanas de gremios y costes que transcurren con potentes glosas en instantes y globos de grandes veladoras del vuelo, del cholo de lodo delineador de vestidos y tablones y fértiles poco extrañados por las culpas y refugios de ninis y lámparas y bartolas de olivo, de ser algo o saber, o rehacer pantalones de los diez escenarios de un escaso como sin menos tamaños de cicatrices por el momento eternas, o como traumas que vienen de vez en cuando a saludar de nuevo y a recordar el último favor con jugo de tetrapak.     

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