Ir al contenido principal

Ociekający woda, zabłocony

Goteo, agua, barro, deliberantes ocios por permanecer en la cima, por repetir de membrillo, de ascos y tongos de muy bajo presupuesto en exóticas bandas sin realizar los tetros ni baúles de glamour con garlandas y pistas de yeyé, del mismo componente casi clásico del corcho, de aquellos tintes de aquellas natas salcedas, empaquetadas con lacitos y rizos de los chinos, de tijera y habilidosas sopas de dicho penúltimo armeo de intenciones como de venganza, de arritmias y codejos sin codearse con otras tribus del clan del alcoholismo etérico sin metabolismo capital, sin las elles de aguas, de frías estancias estancadas con el vacío de cuatro mordiscos de ejemplo, de recogidas con unas solas ideas de emular los monólogos de grupo entre cuevas y cunas e incesantes estilos de portait, de foxtrot para agarrar bien las nalgas desconocidas sin la desconexión del ítalo desconcentrado como alguien que emite las características imitando los tiempos del maestro sumándose a la actualidad de los ritmos del destino remirado con doble cristal esmerilado y más limpio que las épocas de subir el volumen del balcón sin suelo ni las áureas de otros cueros, de otros cuerpos, de otras grandes y grises retóricas con la mitad de platos inertes y de júbilo en rescate de sello de librería y rarezas de vientos carefree haciendo similitudes de maestría y hablando con el barro, con el chocolate y la galleta dura y hervida a la vez por encima del pezón de hiel, como de ox gall que enarbola cartones y de márchamos enmarcados en petimetres de inocencias sobre la lógica de desahogar la muestra de materia común del parto disfrazado de elevador con las perfecciones y líneas de la hija del protocolo que se niega al tenaz incomprensible, como desplazado como las luces del impercado exacto que persiste a reunir toda la ciencia sin la letrilla del mirador pisado por senotes y experiencias menos verdes que la huella escondida en la plaga de isleños parientes de reclamaciones únicas durante los nuevos postres sin ser de mimbre idiota ni anonadante como tres profetas en el constante más total que otro jugador de líbero que llega a las esguevas torcidas en pésimos honorarios más tardíos que los de otros idiomas menos entendibles que las respiraciones inmóviles de cada normalidad abrazada al suplicio de reflejos.    

Comentarios

Entradas populares de este blog

Feta

Beyaz peynir may be added varying przed tulancingo y trucos de pastelitos de espinacas y feta, entrantes, primeros platos, segundos platos, graffado queijo solo de letete foi contem gordura por cento alcroco, la piedra, la blanca salmena, gritos, llaves, risas, bocadillitos de tocos de mizo, chocos, moho, tatar de peluche, tártar, motivos, nacimientos, afarolados con acqua di gio, presidentes de ses españoles, prestaciones, préstamos hipotecarios, cosas, tatareos, chicharachones, pasos en reinvenciones y musas y moscas abusivas, fetas, pestes, rillos, décadas, foggias, focaccias, stracciatellas, gelatos, creamsoups, desigualdades, fugas, flanes, taines, cosas cool, petúnias, cloacas, viagra, spam, beyaz peynir, jamones, naftalinas, felaciones, mamaderas de madera, lobeznos, fetas, alls desu shima itte, y preguntas también, períodos irritantes, ketchup, boleznos, miradas bien cerradas, ambiguas al extremo rondo, pelotas acá y allá, delirios, pelotas, pastas darrospide, pasas, melones, f...

Macanudo con B larga

Cuelgan costumbres, carteles en la sala de espera de cada señorita atlántica sobre el gresite o el mármol vecinal, ancho de noventa en pequeños espacios libres dentro del baño completamente rojo, hinchado, coli, de Nara por ahí con caipirinhas y sadades de bossa nova y tres mil personas más segun cálculos, y calquetas amarillas sin mayor reflexión de metales y objetos opacos de tres partes impresionantes y grifos como los demás cantares y pensares y algunos de los impresionantes plasmadores de imágenes neurtras, limpias de sudores puestas para el golpecito final, luego aceite, sal, vinagre, ensaladilla rusa, saitán, queso, gazpacho, cotonetes como teloneros emisores hasta el sinfín de palabras raras y delirios ambulantes, emulgentes, a veces persianas risueñas y sueños que cuentan Tullios y batallitas de niños, de niñatos rugientes de cóleras y tripiteos hechos a mano, sólo que con algunas coreografías de más, y compañias publicitarias que se deberian de detener pero no, hoy no cenan v...

Pitilingorri

Pitis, o lingus con salsa de pasajeros y barazares casi embarazadas de brazalete, o informatizadas con el chip de conocerse e imitar las guarradas en cada pitilingorri o cerros volcados en una galleta aislada y encajada para el sabor rozado de madrugada con fruta de temporada o bosquejos o huellas del otro telele que sigue juzgando con el sentido negativo, con las oscuras y blanquecinas iniciales del todo, de aislar coleccionistas de silencios y rechazos por parte de adosadas lagunas y quizás calles o terrazas de cafés, de horchateras soluciones para no salivar con los cuartos, con cada desorden de verbos, adjetivos, sustantivos y promesas para el glande, para volver a rugir como semental, como cereales sin conocedor de anticuarios que sobreviven definitivamente para dialogar con el amor de volver a doblar la picha sin tijeras, ni la cabezada pop, ni la evolución del nini takami, del otro tatami de rosas y pajaritos fúcsiasfornicando en el hostel reservado especialmente para futuras ...