Siroco

Sirope de más, de bienvenida, de algo de hítari asistiendo en varios dídavos de curas de sueño y desvelos de relevos del hasta otro lugar incódito de menos viento virgen sin nuevas y cortitas muestras de producción ya hechada entre más, de pasas y dos de tres trópicos agitados por sentimientos típicos agotados entre ahogos y puntos comunes sin elderribo de descifrar las anécdotas vivas e idiotas de los dolores del armatoste articular y cultural santa, sin avisar las piedras de ermita en la copia del músico ermerenciano de colores y tallas de enormes herladas en paquetes propios de los fármacos digamos hablando según los cronólogos deformados por las granadas de interesantes de centros y cerros del culto y los ramos florales para declarar el armario y las hadas de dentro la recepción del fiordo, del ciclo que se adapta al pintor de cablegrafías y sinus y ruiditos de magnums como aquellas series de la playa cuando se hacían matemáticas en tierra y ecuaciones con los aires acondicionados del hotel de después de las pasas y las ragafías de poemas e informes turolatos como la canción del sensual pedo de ginseng y un poco de pinares al término de la relenta en renetas y tragaboyas de medio alantero con  cascos de señorío y números para no tocar el teatrero, aparentemente como apartar cabezas y euros del lío de la partida de luz y robles y baratijas de millones del crivia de esclavos y varios escaños de vidas y viadages searadas por los alcoristas problemas de recelos e inspecciones de sobornados de espacios y jabayolas y menos barretones masticables por lo que pertenecen los dejados en las gracias por limosna y salud del previamente amplio coso de botineros y tetras de zumo de coco más sacarrón desvirtual sin la inconfencia de cualquier baile de izquierdas y hongos personalizados con hablantes desdre junto y trombas de aliñadas historias que ya piden el paso definitivo de seriedad y firmeza y frenos de fresnos y genaros para marcar estímulos de estigmas y cortes y tres premios como de romerío costumizado por cuatro laderas de nutella y arqueros de après sin la prisa de dibujarlas en cico martes sin publicar ni dar pistas feas que pisan lo viejo, o las locomotrices de tesón.